miércoles, 30 de octubre de 2013

La Lechuga

La lechuga se gana el primer lugar del vegetal que todos queremos siempre tener, es la base de la mayoría de las ensaladas y gracias a que existen de muchos tipos podemos cultivarla casi todo el año J. Acá van algunas cosas que les van a servir si la quieren cultivar!
Como ustedes saben existen distintos de tipos de lechuga, las más comunes de encontrar son las  escarolas, españolas, costinas, milanesas y moradas, a nuestro gusto son todas ricas y mientras más variedades sembremos y cosechemos más lindo va a ser nuestro huerto y más variadas van a ser nuestras ensaladas. Aunque existen algunas lechugas que las venden como exclusivamente de invierno (y que son un poco más resistentes) casi todas las variedades  con algunos cuidados las podemos sembrar durante el año completo.
Acá van los consejos
Suelo y clima: Aunque crece en casi cualquier suelo es mejor que este bien abonado (con humus o compost), es importante que este bien labrado y que quede la tierra fina, también debe tener  buen drenaje lo que hace que sea difícil plantarlas en suelos arcillosos. (Si te interesa saber de una forma sencilla y entretenida que tipo de suelo hay en tu casa sigue este método del tacto http://maizedoctor.cimmyt.org/index.php/es/metodos-de-medicion/169 )
Las lechugas prefieren los lugares frescos y húmedos, pueden sembrarse al sol directo pero si estamos en pleno verano y plantamos las lechugas en un lugar que les de sol todo el día van a terminar suicidándose… ¿Qué es que se suiciden? ¿Se suicidan las lechugas?... todas las lechugas si uno no las cosecha empiezan a subir y terminan “espigadas” lo normal es que uno deje algunas lechugas que se espiguen porque así dar flor y semilla pero hay veces que la lechuga nunca se llega a formar bien y se sube al poco tiempo .. en ese caso decimos que la lechuga se suicidó, eso es algo que no queremos que pase.

Siembra y plantación para lechugas en invierno
Se siembra en almácigos, a finales de verano a unos dos cm de profundidad. La tierra del almácigo es muy importante que esté bien abonada y muy suelta para que a la semilla no le cueste germinar, es muy importante que la tierra esté siempre húmeda (no encharcada ni hecha barro, sólo húmeda)
Cuando ya asoman las primeras hojas es importante proteger las plantas con campanas o algún otro tipo de abrigo (más adelante haremos un post sobre ese tipo de técnicas) obviamente si estamos en un lugar muy helado no vamos a poder plantar lechugas fuera de un invernadero. Cuando las lechuguitas empiecen a crecer es importante aclarar el almácigo, eso quiere decir que  si están muy juntas las plantas que van creciendo tenemos que sacar las más pequeñas para darle espacio a las grandes, cuando la planta tiene unos 10 cm la trasplantamos a la tierra a unos 25 cm de distancia entre cada una de ellas.
Cuando la planta ya está grande es bueno amarrarla unos diez días antes de la cosecha para que las hojas de adentro queden más suaves y para que la lechuga no acumule mucha agua en su interior.

Siembra y plantación de lechuga de verano
En primavera podemos sembrar directamente las lechugas al suelo ( solo si la huerta tiene la tierra bien suelta y abonada), las sembramos en hileras separadas unos 45 cm unas de otras, cuando las plantas empiecen a crecer nuevamente vamos a tener que ralearlas para dejar sólo las plantas más grandes separadas entre ellas a unos 25  cm. Las plantas que arrancamos las podemos trasplantar con facilidad a otro lugar.
Hay que preocuparse de no sembrar todo al mismo tiempo, es bueno sembrar pocas semillas cada dos semanas para así tener lechugas listas a lo largo de tiempo y no todas de una vez.

Para finalizar les recomendamos este blog, donde aparecen miles de ensaladas muy originales con lechuga y muchas cosas más

domingo, 29 de septiembre de 2013

La siembra



Ahora viene la parte entretenida de crear un huerto, llegó el momento de elegir que vamos a sembrar y de qué forma vamos crear nuestros cultivos. Antes de partir es necesario tener en cuenta los siguientes puntos:

  El espacio en el que vamos a sembrar: Tenemos que tener claro cual va a ser el área en que vamos a sembrar, si pensamos tener cultivos en un balcón de un departamento obviamente no podemos sembrar papas. Cada planta tiene necesidades específicas de espacio y de suelo (vamos a ir haciendo post de las características singulares de cada cultivo) pero más allá de eso tenemos que ser realistas lo que realmente vamos a poder cultivar.

  El tiempo del que disponemos: un huerto si está bien planificado no necesita mucho cuidado pero de todas formas va a necesitar un poco de nuestro trabajo. Si somos personas en extremo ocupadas vamos a tener que partir teniendo un huerto de cultivos sencillos que no requieran mucho cuidado. Plantas como los tomates, pepinos,berenjenas,  zapallos, zapallitos o algunos tipos de porotos necesitas que les construyamos guías para que los frutos no toquen el suelo por lo tanto si piensas que no tendrás el tiempo para construir las guías es mejor que no pongas de esos cultivos en tu siembra.


 El lugar donde vivo: Puede sonar obvio pero es importante considerar el clima de la zona en la que vivimos, si estamos en un lugar muy seco y sembramos cultivos con mucha demanda de agua eso nos va a significar más trabajo y más gastos, al contrario si vivo en una zona muy lluviosa hay cultivos que no van a resistir tanta humedad

_ La época del año: Hay cultivos que se siembran en distintas épocas del año y hay otros que con algunos cuidados se pueden sembrar siempre, hay que tratar de ir lo más acorde con las épocas ideales de cada cultivo para ser sembrados. 

Les dejamos tablas ilustradas por Elisa para que tengan un calendario de siembra-cosecha, que las disfruten :) 








Compost!









Si no tenemos (o no nos gustan) , las lombrices y tenemos espacio en nuestro jardín podemos hacer compost,  no es más que crear una descomposición controlada de los residuos vegetales en nuestra casa con el fin de reducir la basura y aprovechar los nutrientes, así vamos a tener de forma natural una tierra muy nutritiva para las plantas que pensamos poner en nuestro huerto.

Que necesitamos:


              
Residuos vegetales: sirven los mismos que indicamos para el vermicompost (humus), casi todas las cosas de origen vegetal  se pueden compostar sin embargo los cítricos o los restos de aceite deben ser añadidos en poca cantidad; para que se entienda mejor: si tengo una ensalada aliñada con aceite la puedo poner, si me sobra medio litro de aceite después de freír papas fritas por ningún motivo lo pongo en el compost
               Un contenedor: El compost se suele hacer  en contenedores grandes, para una familia de 4 personas con un consumo normal de vegetales un contenedor de un metro cúbico está bien. Pueden ser de plástico, madera o de malla, lo importante es que tengan buena ventilación y que permitan que nuestro compost esté bien ordenado. (Dibujos compostera de madera, compostera de rejilla, compostera de tambor). Si hay suficiente espacio en el jardín el compost puede hacerse cavando un hoyo en suelo, en ese caso igual va a ser necesario poner una rejilla para evitar que entres insectos o animalitos

El lugar donde pongamos el compost debe ser plano, tener buena ventilación y ser de fácil acceso.


















  











Proceso:
Si lo estamos haciendo sin contenedor:

 1- Poner piedras ordenadas en el suelo sobre toda la superficie en la cual vamos a poner la pila de desechos, esto va a favorecer la ventilación al mismo tiempo que va a dejar entrar a pequeños organismos beneficiosos para el proceso.
2- sobre las piedras poner un poco de tierra o compost maduro.
3- Empezar a poner nuestros residuos vegetales.

Si lo estamos haciendo en contenedor hacemos lo mismo sin capa de piedras.

Mantenimiento:

En el proceso de compostaje intervienen muchos microorganismos que realizan un proceso aeróbico de descomposición por eso es necesario que cada cierto tiempo volteemos la mezcla para que se incorpore aire, si no lo hacemos van a empezar a salir mal olor de nuestro compost y el proceso va a ser más lento, con una vez a la semana que remueva la mezcla está bien .

Humedad: El compost tiene que estar húmedo pero no mojado ni encharcado, si está muy mojado le podemos incorporar diario picado o tierra seca, si esta muy seco podemos ponerle más residuos vegetales frescos, agua o restos de jugos naturales.

 Temperatura: en el proceso de descomposición se produce calor, esto es bueno porque nos indica que el proceso está activo. Si el compost esta muy frió es necesario voltearlo para incorporar aire y que se acelere la descomposición.

Maduración y cosecha del compost:

El compost completo puede tardar de tres a doce meses en estar listo para ser “cosechado” en  verano el proceso es más rápido que en invierno. Las señales que nos indican que está listo son:

 El compost tiene un color café oscuro.
 No tiene olor a comida, solo huele a tierra húmeda.
No se pueden identificar restos de residuos.

En ese momento se puede cosechar y usar directo en la tierra o almácigos!

Algunos datos extras:

 Si ponemos los residuos bien picados el proceso va a ser más rápido.
Si tenemos el compost el el jardín lo podemos poner en un lugar donde sabemos que después vamos a plantar, la tierra bajo el compost va a quedar muy fértil.