domingo, 29 de septiembre de 2013

La siembra



Ahora viene la parte entretenida de crear un huerto, llegó el momento de elegir que vamos a sembrar y de qué forma vamos crear nuestros cultivos. Antes de partir es necesario tener en cuenta los siguientes puntos:

  El espacio en el que vamos a sembrar: Tenemos que tener claro cual va a ser el área en que vamos a sembrar, si pensamos tener cultivos en un balcón de un departamento obviamente no podemos sembrar papas. Cada planta tiene necesidades específicas de espacio y de suelo (vamos a ir haciendo post de las características singulares de cada cultivo) pero más allá de eso tenemos que ser realistas lo que realmente vamos a poder cultivar.

  El tiempo del que disponemos: un huerto si está bien planificado no necesita mucho cuidado pero de todas formas va a necesitar un poco de nuestro trabajo. Si somos personas en extremo ocupadas vamos a tener que partir teniendo un huerto de cultivos sencillos que no requieran mucho cuidado. Plantas como los tomates, pepinos,berenjenas,  zapallos, zapallitos o algunos tipos de porotos necesitas que les construyamos guías para que los frutos no toquen el suelo por lo tanto si piensas que no tendrás el tiempo para construir las guías es mejor que no pongas de esos cultivos en tu siembra.


 El lugar donde vivo: Puede sonar obvio pero es importante considerar el clima de la zona en la que vivimos, si estamos en un lugar muy seco y sembramos cultivos con mucha demanda de agua eso nos va a significar más trabajo y más gastos, al contrario si vivo en una zona muy lluviosa hay cultivos que no van a resistir tanta humedad

_ La época del año: Hay cultivos que se siembran en distintas épocas del año y hay otros que con algunos cuidados se pueden sembrar siempre, hay que tratar de ir lo más acorde con las épocas ideales de cada cultivo para ser sembrados. 

Les dejamos tablas ilustradas por Elisa para que tengan un calendario de siembra-cosecha, que las disfruten :) 








Compost!









Si no tenemos (o no nos gustan) , las lombrices y tenemos espacio en nuestro jardín podemos hacer compost,  no es más que crear una descomposición controlada de los residuos vegetales en nuestra casa con el fin de reducir la basura y aprovechar los nutrientes, así vamos a tener de forma natural una tierra muy nutritiva para las plantas que pensamos poner en nuestro huerto.

Que necesitamos:


              
Residuos vegetales: sirven los mismos que indicamos para el vermicompost (humus), casi todas las cosas de origen vegetal  se pueden compostar sin embargo los cítricos o los restos de aceite deben ser añadidos en poca cantidad; para que se entienda mejor: si tengo una ensalada aliñada con aceite la puedo poner, si me sobra medio litro de aceite después de freír papas fritas por ningún motivo lo pongo en el compost
               Un contenedor: El compost se suele hacer  en contenedores grandes, para una familia de 4 personas con un consumo normal de vegetales un contenedor de un metro cúbico está bien. Pueden ser de plástico, madera o de malla, lo importante es que tengan buena ventilación y que permitan que nuestro compost esté bien ordenado. (Dibujos compostera de madera, compostera de rejilla, compostera de tambor). Si hay suficiente espacio en el jardín el compost puede hacerse cavando un hoyo en suelo, en ese caso igual va a ser necesario poner una rejilla para evitar que entres insectos o animalitos

El lugar donde pongamos el compost debe ser plano, tener buena ventilación y ser de fácil acceso.


















  











Proceso:
Si lo estamos haciendo sin contenedor:

 1- Poner piedras ordenadas en el suelo sobre toda la superficie en la cual vamos a poner la pila de desechos, esto va a favorecer la ventilación al mismo tiempo que va a dejar entrar a pequeños organismos beneficiosos para el proceso.
2- sobre las piedras poner un poco de tierra o compost maduro.
3- Empezar a poner nuestros residuos vegetales.

Si lo estamos haciendo en contenedor hacemos lo mismo sin capa de piedras.

Mantenimiento:

En el proceso de compostaje intervienen muchos microorganismos que realizan un proceso aeróbico de descomposición por eso es necesario que cada cierto tiempo volteemos la mezcla para que se incorpore aire, si no lo hacemos van a empezar a salir mal olor de nuestro compost y el proceso va a ser más lento, con una vez a la semana que remueva la mezcla está bien .

Humedad: El compost tiene que estar húmedo pero no mojado ni encharcado, si está muy mojado le podemos incorporar diario picado o tierra seca, si esta muy seco podemos ponerle más residuos vegetales frescos, agua o restos de jugos naturales.

 Temperatura: en el proceso de descomposición se produce calor, esto es bueno porque nos indica que el proceso está activo. Si el compost esta muy frió es necesario voltearlo para incorporar aire y que se acelere la descomposición.

Maduración y cosecha del compost:

El compost completo puede tardar de tres a doce meses en estar listo para ser “cosechado” en  verano el proceso es más rápido que en invierno. Las señales que nos indican que está listo son:

 El compost tiene un color café oscuro.
 No tiene olor a comida, solo huele a tierra húmeda.
No se pueden identificar restos de residuos.

En ese momento se puede cosechar y usar directo en la tierra o almácigos!

Algunos datos extras:

 Si ponemos los residuos bien picados el proceso va a ser más rápido.
Si tenemos el compost el el jardín lo podemos poner en un lugar donde sabemos que después vamos a plantar, la tierra bajo el compost va a quedar muy fértil.